Che Guevara
El pásado sábado, en la Facultad de Medicina, se realizó el Congreso Ordinario de la FUBA que coronó a la lista “Por Otro 1918” como la conducción de la Federación por segundo año consecutivo. Así, el espacio de la Izquierda Independiente conformado por La Mella, Rebelión, La Mala Educación, Un Sólo Grito, Plan B y Socialismo Libertario renovó la apuesta por la transformación de la FUBA consagrando a Ignacio Kostzer como nuevo Presidente, y dejando atrás a las listas de la Franja Morada-UCR y la Cámpora-PJ.
Este Congreso presentó algunas novedades que dan cuenta del camino de transformaciónque desde hace un año está viviendo nuestra Federación. Uno de ellos fue realizar jornadas con paneles y comisiones de debate, para que en un mismo momento la Federación defina su conducción y sus principales ejes de intervención política de forma democrática, abierta y plural.
El segundo aspecto a destacar es que, en un hecho histórico, fueron acreditados 128 de los 130 delegados mandatados al Congreso. Así la Franja Morada se quedó como nunca sin margen de maniobra, teniendo que reconocer la absoluta legitimidad de la Federación que en reiteradas oportunidades intentó partir y desconocer, ubicandose en el lugar subordinado que le corresponde por su constante retroceso en los espacios de conducción legítimos del movimiento estudiantil.
Desde este espacio seguimos pensando que es vital darle a la Federación una vida cotidiana, acercandola al conjunto de los estudiantes. Es en ese sentido que el año pasado efectuamos una seria de actividades, tanto desde la Presidencia como desde las Secretarías de Cultura, Extensión e Integración Latinoamericana. Las Jornadas Abiertas de debate de la FUBA, las Jornadas Contraculturales, la Catedra Libre Nuestra América, las clases públicas en relación al Bicentenario, las ferias de productos autogestivos y la edición del discurso de Alvaro Garcia Linera en Derecho mostraron un impulso de apertura de la Federación a cada aula y cada facultad, a las inquietudes e intereses del del movimiento estudiantil.
A su vez, podemos decir que la FUBA tuvo un papel protagónico en el Estudiantazo, visibilizando y enfrentando la crisis edilicia de la Universidad de Buenos Aires, y logrando, junto a los Centros de Estudiantes, importantes triunfos, como la partida extraordinaria de 20 millones y la concreción del tercer pliego para el Edificio Unico de Ciencias Sociales.
Entendemos que este triunfo expresa una fuerte vocación de cambio y renovación en la política, tanto del movimiento estudiantil como de la juventud argentina en general. Desde el espacio de la Izquierda Independiente vamos a seguir apostando a la democratización y la refundación de la FUBA, que en este año marcado por la agenda electoral, tiene la tarea de seguir constituyéndose como referencia de una generación entera que no se conforma con lo que hay, que va por más.
Queremos una FUBA que, como decía el Che, se pinte de pueblo e intervenga en los grandes debates del país, desde la perspectiva de la juventud y de la defensa de lo público.
Hacia allá vamos.
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