septiembre 07, 2011

Denunciamos la brutal represión a detenidos por la presentación de un libro

La presentación del libro “Cárceles de Mala Muerte”, en la prisión “Modelo” de Coronda, desató la ira de los penitenciarios que responden al gobierno de la provincia de Santa Fe. Pablo Cococcioni, hombre de Hermes Binner y jefe de la Unidad, envió al Grupo Especial de Operaciones Penitenciarías a desnudar y apalear a los compañeros, romper todo, incluso a arrancar las páginas de los volúmenes regalados. Es que el libro revela, en palabras de los propios de detenidos, el maltrato sistemático e inhumano que se vive en ese y otros penitenciarios de la Argentina. “Cárceles…” reúne textos del Premio Nóbel, de la Paz  Adolfo Pérez Esquivel, la socióloga Alcira Daroqui, Roberto García del Comité contra la Tortura, Francisco Mugnolo, procurador penitenciario de la Nación,  compañeros/ as en situación de cárcel y luchadores/as  anónimos. Una represión parecida se perpetró meses atrás cuando las mismas personas presentaron “Esta vez decido yo”, de Olga Guzmán e "Intensidades de Mujer", donde escriben 18 mujeres de la cárcel de Ezeiza. Las voces no deben salir de los muros, es el mensaje del Servicio Penitenciario, sea Provincial o Federal. Pero las voces escapan y logran traernos su verdad, la terrible realidad de las cárceles en nuestro país: la corrupción estructural, las torturas sistemáticas, el maltrato a los familiares, las muertes, el abandono...El pasado 31 de Agosto en la Facultad de Filosofía y Letras, La Juntada, Conducción del Centro de Estudiantes, organizó una actividad de la que participaron distintas revistas que se escriben en cárceles: “La resistencia”, del penal de Villa Devoto, “Hablar desde el Silencio” de la Unidad nº 48 de José León Suárez, "Oasis" de Ezeiza y “Todo Piola” y a la que acudieron más de 300 personas. Estas, y muchas otras, son las experiencias que luchan por romper el silencio y el aislamiento de los muros y que con su actividad generan tanta ira en los penitenciarios. Denunciamos cómo el Servicio Penitenciario de la Provincia de Santa Fe y el Servicio Penitenciario Federal reprimen a nuestros compañeros y compañeras, en situación de encierro, por hacer oír su voz. Hacemos responsables al Gobierno provincial de Santa Fe y al Gobierno Nacional, de quienes dependen los Servicios Penitenciarios, por las sistemáticas violaciones a los derechos humanos de la personas en situación de encierro.